20121125

Morado. (Parte 2)

<< -Venga chicos, no seáis un caguetas, vamos,- gritaba el niño del polo azul, a unos cuantos metro por delante del grupo.- que no tengo todo el día.
-Pe... pero ¿y si es cierto lo que dicen?
-¡Tú estás tonto! ¿Cómo va a ser verdad?,- replicó el chico de los pantalones de pana.- Alguien lo habría dicho ya, y este sitio estaría cerrado por la policía, no por un vieja loca ya muerta.
-Sí... tienes razón...

E inseguramente arrastró los pies con los otros dos niños, para adentrarse juntos en el fondo del bosque. >>

Recuerdo que mi abuelo siempre me contaba la misma historia. Un inofensivo cuento para niños. Mi madre siempre bromeaba diciendo "más que para niños, es para no dormir" y todos rompían en carcajadas. Todos menos yo, claro.

-¡Eh, tú! ¿Qué haces aquí? ¡Venga despierta! ¡Vamos! No quiero tener que esposarte dormido...
-Pero qué...- balbuceé mientras intentaba no quedarme ciego por la luz del sol.- ¿Eres policía?
-¿Y tú imbécil? ¡Venga vamos!- tiró bruscamente del brazo para levantarle.
-¡Más cuidado! Casi me arrancas el brazo.
-Espera a que te ponga las esposas.

Y efectivamente, las ató tan fuerte que pensó que le cortarían las manos.

Las siguientes tres horas fueron bastante breves: le montó en coche y se lo llevó a la comisaría; gritó, pataleó e incluso lloró; intentó explicar a la agente lo que había pasado la noche anterior, qué hacía allí en el bosque.
Pero a pesar de todos sus esfuerzos, seguía sin entender qué hacía esposado en aquel zulo, esperando a que el abogado de turno viniese a defenderle.

<< El niño del polo azul fue el primero en ver aquel... aquel rostro de pesadilla; fue el primero en gritar, intentar encararse y huir. También fue el primero en caer. Parte de su sangre, con un pequeño aderezo de vísceras, bañó a los otros dos niños enmudeciéndoles el grito, y paralizándoles esas rollizas piernas de niño mimado... >>

 La pequeña niña, cayó prendada del apuesto y solitario príncipe, jurándole amor eterno. Y el príncipe, desconfiado pero ahogado de pasión, la hizo prometer que jamás miraría qué había detrás de las puertas de la tercera torre. Jamás...
Pero frágil es la mente del ser humano, y poderosa la curiosidad de una niña. Así que una mañana en la que el príncipe de su amor había marchado de cetrería, pensó: "por qué habría mi príncipe, el amor de mi vida ocultarme algo. Quizás me esté protegiendo de lo que esconden esas puertas, quizás me esté protegiendo porque piensa que soy una niña. Pero yo soy su amor, su princesa, ya no soy una niña". Y fue así como con paso firme y decidido, la muy adulta de la niña, entró en la tercera torre, la torre prohibida.




20120817

Morado. (Parte I)

<< Tus ojos son morados como tu lengua. Y tus besos fríos como el calor que desprenden tus caricias sobre mi piel. Apenas ya, me sacian tus labios mortecinos, sumisos, taimados... Te dejé marchar... y has vuelto a mí como un juguete roto... >>

Las horas se tornaban a cada momento más duraderas. Ya no recordaba cuánto tiempo había pasado desde que el último autobús de la noche desapareció ante sus ojos. ¿Dos horas, tres horas, quince minutos? Tampoco es como si le importase. Pero era la única forma que tenía de evitar el sueño que intentaba apoderarse de él. No quería dormir en aquella estación oxidada y sobretodo solitaria, en mitad de un pueblo que no conocía, con gente que no conocía, y sonidos que no conocía. Desde luego, la mejor escena para cerrar los ojos y soñar.

Cuando había sido más pequeño, su abuelo siempre le había narrado historias del lugar en que nació.-El bosque se apodera de todas las colinas hasta donde la vista se pierde,- solía narrar con emoción- pero incluso en un paraje como aquel, habían crecido casas. Y estaban habitadas con gente, gente humana ¿te lo puedes creer?

-Pero abuelo, ¿cómo pueden crecer las casas? Tienen que construirlas señores con cascos,- le contesté yo aún siendo un mocoso- que me lo dijo mamá. Y un día vimos a esos señores construyendo una casa muy grande al lado del parque.

-Cuando seas más mayor te contaré una historia,-rompió en carcajadas el abuelo mientras le revolvía el pelo- pero ahora tienes que irte a dormir, o sino tu madre me regañará.

La nube de recuerdos estalló y volvió a la realidad. Se había quedado traspuesto, no habían sido más de dos segundos. Pero comprobó nerviosamente que todas sus pertenencias estaban a salvo: maleta, cartera, móvil... -"El billete"-Pensó. Y de un respingo se puso en pie; pulso acelerado y sudor frío en la espalda. Volvió a palparse los bolsillos con las últimas esperanzas de encontrarlo. No hubo suerte. Miro a su alrededor y vio una persona alejarse corriendo con un billete en la mano. Salió corriendo. -"¿Cómo es posible que no lo haya notado? Maldito bastardo, pienso matarlo en cuanto lo coja"-Pensaba mientras sus zancadas así como las del perseguido, se desvanecían en la noche.

Tenía las piernas recogidas para abrazarse las rodillas. Se sentía fuertemente magullado y le costaba respirar. Había girado a la izquierda, se había tropezado en unos arbustos. Luego volvió a girar: derecha, izquierda, y ahí se perdió definitivamente. Cuando entró en lo profundo del bosque, dio por perdido al ladrón, los billetes y a sí mismo. No sólo no sabía dónde estaba, sino que su móvil no tenía cobertura y su maleta le esperaba en la estación.
-¡Mierda puta!- comenzó a gritar a la luna- ¡Joder! ¡Ahí te ahogues luna de mierda! ¡COÑO!- apoyó la espalda contra el tronco del árbol que tenía más a mano. Y siguió maldiciendo hasta quedar dormido con los ojos rojos de ira. Esa noche soñó con su abuelo.

20120528

Un nuevo retorno.

Y volvemos al papel en blanco,
al grano fino de la desesperación que lo perfila.
A las luces de colores en tonos sepia.
Al negro sobre blanco que nunca se acaba,
y tampoco comienza.
Que ya no quedan más letras;
ni para mí, ni para nadie.
Que miraré a la ventana con ternura,
para ver si ella me muestra el camino.
No como esta estúpida hoja blanca.
"¿Me echabas de menos?".
Sí, pero ahora te echo de más.
A ti y a tu estúpido cielo;
ahí se pudra tu lienzo de pureza.
Que a rebanarme la cabeza,
mejor: cualquier otra parte.
Dejar tantas drogas: el dolor y la alegría.
¿Para volver a esta mierda,
borracho y sin bebida?
Que le follen a tu puta salida,
y a la falsa felicidad en la que ahogas tus pesadillas.
Sí, tú. A ti te lo digo. Despierta y recoge tu vida.
Deja de caer entre lluvias de cenizas,
cede al veneno de la voluntad
para ser bravo y osado,
para ser otro gilipollas más:
con el pensamiento perdido
en lo que es y será.
Así lucharás con fiereza,
sintiendo el odio surgir.
Y cuando te estallen de ira las venas,
y el dolor se apodere de ti.
Gritarás despedazando tu alma:
rompiéndote por dentro,
intentando salir.
Buscarás un poder que te haga despertar.
Una última lágrima que recorra tu cara.
Un suspiro. Una melodía. Una palabra.
Un recuerdo. Un beso. Una idea.
La lluvia. El cielo. El sol.
La noche. El día.
Algo por lo que sangrar una vez más.
Algo por lo que alzar el puño y luchar.
Y cuando ese algo adquiera un nombre,
una forma.
Cuando nuble tu mente e ilumine tu camino,
hasta hacer de la muerte un bello cuento,
y de la vida un leve suspiro.
Sólo entonces, hijo mío.
Serás capaz de ver lo que hay más allá.
Sólo entonces,
comprenderás qué es la felicidad.
Qué son las mentiras.
Qué es el amor.
Qué significa ser hombre.
Qué significa ser libre.
Sólo entonces, hijo mío.
Podrás afrontar la verdad.

20120211

Broken thoughts



When I walk back home and shadows surround me, thoughts come to my head. It´s something I can´t avoid, better said, I don´t want to. And then I stare at the moon, wondering about my feelings or even if they still exist inside of me. But I´m afraid that the answer is yes.

<...I like feeling pain, somehow it makes me feel alive
     ....somehow, remembers me I still feel....>

It has taken me a long time to realize of what I rellay feel: Pain, Fear, Anger, Sorrow ,Hope, Joy. Feelings, thoughts that made me fall apart to the bottom of a broken glass full of lies that made me drown. But I ignored the Pain, I faced the Fear to melt in Anger. I overcame the Anger I felt and let the Sorrow come in. I was lost in that mist, blinded and hollowed. 

<...I just want something...
  ....something I can never have...>

The time passed as nothing happens and I just was...me...and my thoughts. So I kept thinking and thinking and thinking. Untill one day, in which I asked myself: "Am I free?". And my answer was: "No, I´m not. Never was. Never will be. I´m just a man enslaved by his thoughts, by his feelings. I´m just a man who obey his own beliefs and defend them with sweat and blood. But perhaps, that´s what being free means: being your own slave." Was then when everything went clear inside my mind. I´m like a snake: hidden within the shadows, waiting for the perfect moment to attack its quarry, instead of just attacking. 

<....You make this all.....
   .....You make this all go away....>

Sometimes, I wonder if things would be easier doing only what my feelings say. Sometimes, I wonder if everything would be better being someone else. Sometimes, I´m an asshole. Sometimes, I wonder if I should just let it go. Sometimes, I think I´m afraid of falling again.Sometimes, the Pride can be annoying. But it will always remember you not to give up. Because while we still alive, while we still can breathe, there will be Hope. And after our end, Hope will remain inside our memory, as the Joy we feel fighting for our freedom.
But after all, what do I know? I´m just a shadow within a shadow watching how the world change in front of me, waiting for the perfect moment to act instead of making it happens.

<...But in the end....
    ....I promise I won´t let you down....
         ....I promise I won´t make you hurt....>


When your life becomes a shadow,
a shadow is what you become.

20120117

Cosas que pasan

<<
 -Buenos días doctor.
-Buenos días. Dígame qué le ocurre.
-Poca cosa doctor, no soy capaz de sonreír, no duermo por las noches, me encuentro siempre triste, no me apetece trabajar, ni comer. En general, no encuentro razones por las que debería seguir viviendo.
-Vaya hombre, usted parece tener una depresión aguda.
-¿Y qué puedo hacer?
-Pues mire, ha venido a la ciudad un circo que tiene un payaso, que parece hace milagros. Todas las personas que le han visto actuar, han vivido felices y libres de todo mal y espanto. Así que lo debe hacer es...
-El problema es ese doctor, yo soy el payaso del circo.
>>

Últimamente no duermo. Bueno sí, duermo. Pero duermo poco y mal. Tal vez se me hayan cambiado los horarios de sueño, tal vez sea algo peor. No obstante, tiene sus pequeñas ventajas. Vale quizás no. Pero en general me han permitido escribir algunas de mis últimas entradas, que siempre está bien.
El problema de no poder dormir, no es el hecho en sí. Sino en qué aprovechas el tiempo que estás en vela. Las primeras veces que uno se desvela, suele darse la vuelta en la cama, cerrar los ojos, e intentar retomar el sueño. Es probable que tras dos o tres horas de cambios de postura, quede dormido. De no ser así, encenderá la luz y se pondrá a hacer algo útil. ¿A qué he dedicado yo mis horas de no sueño estos días? La primera vez a intentar dormir. El resto de veces, gasté mi tiempo en pensar. Sí, ese ejercicio tan divertido y a la vez asqueroso. Pues a eso.
El irme a dormir a altas horas de la madrugada, era un vicio que tenía cogido desde hacía tiempo. Pero el duermevela lo he adquirido poco antes de estas navidades. Las primeras veces no te das cuenta. De hecho, yo no me di cuenta hasta el domingo pasado (o el anterior), que decidí irme "pronto" porque al día siguiente tenía un examen. ¿Qué ocurrió? Antes de la una de la mañana Pepe estaba durmiendo. Tras un extraño sueño Pepe se despertó creyendo que faltaría poco para la hora de levantarse. Pepe se equivocaba, faltaban más de tres horas para eso.
Es increíble lo que pueden dar de sí tres horas cuando apenas hay distracciones.
Ayer (o anteayer) me ocurrió lo mismo. Así como hoy y probablemente mañana, como me lleva ocurriendo todas las navidades. Hasta el punto de que he optado por creer que mi cuerpo se ha adaptado a dormir poco. Eso explicaría por qué cuando me acuesto tarde y me levanto pronto. Aunque otra opción bien podría ser los nervios. Que todo esto que he pensado sean simples "pepecinaciones" y tan sólo haya caído presa de los nervios los días mentados.
Stuff i like.
Pero a lo que iba: el tiempo. Cuando no tienes nada que hacer, lo primero que uno suele decir es "me aburro". Por suerte o por desgracia, en mi casa esa palabra es tabú, y se aplica lo que decía mi abuelo "en este mundo sólo se aburren los tontos" (es horrible pensar la maldita razón que tiene esa frase). Así que no nos queda más remedio que buscar algo para amenizar nuestras noches: aficiones.  
Pero me temo que esto no es suficiente. No te aleja de los malditos pensamientos. Incluso a veces es peor, porque los atraen.
Yo llevo tiempo dándole muchas vueltas a un tema bastante complejo. En parte porque es algo que desde pequeño me obsesiona, en parte porque no hago más que rodearme de parejas. Sí, me refiero al amor. Normalmente, lo intento analizar, intento buscarle un significado, una lógica, un maldito por qué. Pero no sólo no encuentro nada que me satisfaga sino que encima me molesta. No obstante, no voy a intentar analizarlo aquí.
The loner.
El principal problema que conlleva este tema, al margen de las razones; es, ¿por qué yo no? Cuando uno está solo, no suele ser consciente de su soledad hasta que no está rodeado de gente. Si esta gente se conforma de parejas amorosas, es aún peor...
A mí me gusta estar solo, me gusta estar a mi aire: hacer lo que quiera, cuando quiera y porque quiera. Perderme en mis pensamientos, mis aficiones. Perderme en mí.
Pero evidentemente, esto no es infinito. Llega un momento que quieres estar con alguien. Necesitas contacto humano. Sientes que hay en ti un vacío existencial. Quieres alguien que lo llene. Alguien con quien tengas una relación más compleja que con tus amigos, pero que al mismo tiempo sea tu amigo. Una persona con la que te sientas especialmente a gusto, y al mismo tiempo libre. Una persona que¡¡ ARG!! Que complicado es de explicar esto, coño. En resumen y para no aburrir: lo que creías que querías no era lo que necesitabas. Y lo que necesitas, es lo que realmente quieres. 
What you really needed
What you thought you needed
The shadow of who I am.



Es algo muy frustrante. Ya que lo que normalmente quieres, no es lo que necesitas. Y cuando quieres lo que necesitas, no puedes tenerlo.¿Por qué? Porque a quien se le ocurrió esto del amor, también se le ocurrió la gracia de hacerlo difícil. De manera que muy rara vez, serás amado por la persona a la que amas. Y ya no sólo eso, sino que a lo mejor uno de los dos ama más que el otro: se podría romper. Quizás todo este melodrama no esté tan mal, y sólo sean las desbaratadas ideas de un genio creador. Al que se le ocurrió poner todo esto del dolor, el amor no correspondido, llantos, lágrimas, desconsuelos y demás jaurías, para no meter la pata estrepitosamente. Le salió al revés la criatura. No obstante, todo este paquete de sentimientos que implica el amor, en el fondo se acaban disfrutando y a la larga agradeciendo. Es posible, que de no ser por la cantidad de desamores que llevo acumulados, no estaría escribiendo esto. Ni me lo habría planteado. Es más, no habría escrito muchas de las cosas que he escrito, o compuesto muchas de las cosas que aún no he pasado a partitura (pero están en mi cabeza compuestas ). Lo más seguro, es que si no fuera por todo este dolor acumulado, yo no sería quien soy ahora, ni la vida sería tan interesante como puede llegar a serlo. Pero al fin y al cabo, qué sé yo. No soy más que otro pobre iluso que no puede dormir.

20120116

Mintiéndome a mí mismo.

Dejaré de pensar en ti cada vez que cierro los ojos.
Dejaré de torturarme por lo que la gente dice, hace y piensa, cada vez que pretendo dormir.
Dejaré de torturarme por lo que hago, digo y pienso, cada vez que pienso en la gente.
Dejaré de sentir envidia y celos hacia absolutamente todas las personas.
Dejaré de decir cuán terribles son las anteriores y justificar por qué son tan absurdas y habituales.
Dejaré de explicar por qué no creo en la felicidad.
Dejaré de pensar que es sólo porque no creo que sea feliz, aunque en el fondo sí lo sea.
Dejaré de sentirme frustrado tanto sentimental como sexualmente y rechazar a cada chica que quiera dejar ese tipo de huella en mi vida.
Dejaré de pensar en lo triste y patética que es mi vida.
Dejaré de arrepentirme de pensar lo anterior aunque realmente lo crea.
Dejaré de intentar entender a la gente.
Dejaré de preguntarme por qué.
Dejaré de pensar que el mundo está podrido.
Dejaré de creer ciegamente en muchas personas.
Dejaré de buscarle cinco pies al gato.
Dejaré de escoger el camino difícil sólo porque el fácil me parece aburrido.
Dejaré de decir cosas con significados ambiguos y terceras intenciones.
Dejaré de preocuparme por las personas a las que quiero.
Dejaré de querer proteger a todas ellas.
Dejaré de creerme una persona fuerte sólo para no dar problemas.
Dejaré de pretender ser útil y ayudar a todo el mundo.
Dejaré de ver películas románticas y cabrearme por el final, sean felices o no lo sean.
Dejaré de intentar ser un buen escritor porque no tengo talento.
Dejaré de intentar ser un buen músico porque no tengo talento.
Dejaré de intentar las cosas sólo porque no soy bueno realizándolas.
Dejaré de pedir disculpas y justificarme por absolutamente todo.
Dejaré de creer que lo hago todo mal.
Dejaré de decirte que esta noche dormiré para que no te preocupes más por mí.
Dejaré de sentirme como un idiota cada vez que haga cosas como esta.
Dejaré de clavar mi mirada en los ojos de la gente e intentar usar "haki".
Dejaré de reírme por lo que acabo de pensar.
Dejaré de guiñarme un ojo y sonreír cada vez que me miro en un espejo.
Dejaré de odiarme a mí mismo por ser tan gilipollas muchas veces.
Dejaré de luchar por las cosas que quiero y en las que creo.
Dejaré de sacar notas tan bajas aún pudiendo sacarlas mejor.
Dejaré de pensar que existen las segundas oportunidades.
Dejaré de sentirme solo aún estando rodeado de gente.
Dejaré de tener esperanza en las cosas que son imposibles.
Dejaré de pensar que nunca me llegará el amor.
Dejaré de pensar que lo anterior es porque nunca encontraré a nadie mejor que tú.
Dejaré de provocar dolores de cabeza.
Dejaré de ser tan vomitivo cuando me da el punto.
Dejaré de quejarme de todo y por todo sin motivo.
Dejaré de trasnochar día sí y día también.
Dejaré de mentirme a mí mismo.



20120109

No puedo dormir

No puedo dormir.
Estoy en ese momento de lucidez en el que las ideas brillantes parecen mezclarse de forma un tanto caótica en tu cabeza, para terminar escurriéndose por tus hombros  tras salir por tus orejas. En ese momento en el que desearías que la técnica que tantas veces has mentado, gritado y redicho durante tus aventuras, fuese real.
-¡Kage bunshin no-jutsu!- Y así llenar el cuarto de copias tuyas a las que poner a trabajar en cada una de tus alocadas memeces.-Tú, escribe esta cosa. Tú, escribe esta otra. Tú, el del fondo, sí, tú. No seas huraño, coge la guitarra, los cascos y ponte a componer con el otro mindundi. Mientras, ese que está ahí detrás escondido, os va a ayudar a escribir letras para lo que compongáis.
Todo ello para recibir un fuerte "entendido" que sonará cinco veces, quizás junto, quizás separado. Pero así será. Mientras tú, volverás tan feliz y campante a tu dulce cama. Mullirás la almohada, apoyarás la cabeza y no podrás evitar sonreír al imaginarte a cabeza-de-bombilla diciendo "pero la almohada es mía". Y cerrarás los ojos para caer en un profundo y plácido...
-¿Queréis parar con la puta guitarrita? ¡Joder! Es más molesto de lo que esperaba.- Deshaces los tres clones encargados del tema- Bueno, ya me encargaré de ello en algún otro momento de mi...- La carcajada te salió sola, cosa que pasan. Cierras los ojos y vuelves a dormir.
Estás flotando en alguna clase de espacio. No tienes un cuerpo físico, eres un ente inmaterial. Pero mantienes tu forma y aspecto a pesar de ello. Viajas por un mundo extraño. A tu alrededor ves números, letras, palabras, recuerdos. Ves algunos sonidos y escuchas unos pocos olores. Te sorprendes al descubrir la ecuación matricial a la que parece estar sometida el sabor del morado. Pero no te llama la atención que este sepa a felicidad.
- ¡Hmm! Felicidad...- Te relames del gusto, y dudas que sea posible. Entonces la fruta desaparece de tus manos. Comienzas a preguntarte "¿Qué es la felicidad", "¿Podré yo ser feliz algún día?", "¿Realmente existe?". << Pero espera, la felicidad tiene que ser algo perfecto. Si no, sería contradictorio a su propia definición. Mierda... no existe la felicidad para mí. ¿Nunca podré ser feliz?. Bleh, tonterías. Desde un punto de vista general sí se me podría considerar una persona feliz...¿verdad? Tengo amigos, salud, dinero,... esta otra cosa...como se llama...>>
Un repiqueteo constante taladra tu cabeza sin dejarte pensar con la claridad que desearías. Y entras en el modo "bucle infinito". Buscas esa palabra por el mundo de tus sueños, e indirectamente por tu subconsciente. Pero no consigues encontrarla, las cosas no parecen estar quietas y eso produce el repiqueteo. Te frustras. Te estresas. Te revuelves. Te despiertas. Miras con cara de odio a tus dos clones restantes, y los haces desaparecer con esa mirada. Estás enfadado. Das la vuelta en tu cama de la forma más violenta y llamativa que se te ocurre a estas horas. Una risa en tu cabeza te grita "estás desvelado, no puedes dormir", y sigue riendo. Intentas retomar tu sueño de alguna manera, pero eres incapaz. Así que decides seguir pensando en esa palabra.
<< Amor, sí, creo que era eso. ¡Oh mierda! Yo no tengo de eso...>>
Seguirás dándole vueltas y más vueltas, buscando algún razonamiento lógico por que justificar esa falta de amor. "¿Es porque quieres?", "¿Es porque eres poco afortunado?", "¿Por qué los demás pueden y yo no?" ,"¿A lo mejor me estoy equivocando y sólo no sé verlo?" ,"¿Qué cojones es el amor?". Genial, ahí vamos otra vez.
<< Vale, está claro que si quiero ser "feliz", tengo que encontrar el amor. Pero ¿Dónde? Lo primero, intentemos pensar qué es el amor. Sentir amor, implica sentir un afecto hacia otra persona. Implica sentimientos, por lo que es algo más que una mera atracción carnal. Ahora bien ¿Qué sentimientos? Así de primeras, diría que una atracción. Para sentir amor hacia algo o alguien, tiene que tener un algo, que implique su proximidad física hacia ti. Pero no sólo eso, también tiene que existir un algo aún más profundo. No obstante, si intentamos separar cosas de la otra persona (sus cualidades, habilidades, físico, etc...) , nos damos cuenta de que nos gustan cosas sueltas. Pero eso es sólo gustar. Te puede gustar más una cosa que otra. No, eso no puede ser amor. El amor tiene que ir algo más allá. ¿Tal vez...? Sí, tal vez el amor implique todo el paquete completo, tanto las cosas que te gustan como que no. Genial. Ahora, si este es único. Significa que va un poco al margen de las aficiones y gustos. Pero no lo tengo claro, supongo que cada uno buscará el amor allí donde pueda sentirse más identificado. O sólo será casualidad que encuentres el amor en lugares donde existen afinidad de aficiones. Lo que sea. El caso, es que me equivocaba, sí que tengo amor. Sí que soy "feliz>>
Sonríes como un idiota e intentas dormir. Pero algo te escama, no paras de rondar el tema en tus pensamientos. Sientes una sensación extraña en tu interior, sí, cerca del estómago. Te levantas y vas a la cocina a satisfacer el hambre nocturno. Coges unas galletas, unas rodajas de salami que había en la nevera. Están un poco duras, pero servirán. Rebuscas por un par de lonchas de queso ¡Voilá! Una vez has saciado el hambre, vuelves a tu posición horizontal previa. Tan sonriente e idiota como antes.
Creías que esta vez ibas a dormir, pero no. Sigue ahí esa pequeña espina, sigue ahí. Punzando todo impulso eléctrico transmitido a través de tus neuronas, maltratando tus pobres pensamientos. Te agarras fuertemente las rodillas colocándote en postura fetal, e inconscientemente aprietas la mandíbula.
<< ...Si ya he comido, por qué me siento tan vacío por dentro...>>
Pensamientos, pensamientos, pensamientos. Dudas, dudas, dudas. Juegan contigo y te torturan. Taladran las paredes de tu cerebro hasta hacerlo explotar. Y a ti con él.
No puedes evitarlo, no consigues dormir, sólo piensas y piensas y piensas. Empiezas a discutir si seguir en la cama sintiendo lástima de ti mismo, o levantarte y hacer algo útil hasta que Morfeo quiera venir a saludarte. Recuerdas algo que dijiste alguna vez, o algo que te dijeron o leíste: "lo peor que puedes hacer nunca, es sentir lástima de ti mismo. Eso es mediocre.". Así que te levantas. Revisas el correo, las páginas que te interesa: nada nuevo. Abres ante ti una enorme hoja en blanco, que nada más verte, se pone a reír y burlarse. "Será zorra" Piensas. Y la acuchillas brutalmente con tu verborragia noctámbula. Al acabar de escribir, miras la hora...
<< Joder, en menos de cuarenta minutos debo levantarme... Y sigo sin tener sueño....>>
Refunfuñas un par de veces más, y publicas lo escrito. Ahora te tumbarás en la oscuridad de tus pensamientos, hasta que la soledad llene el vacío que han dejado en tu interior éstas y aquellas ideas. En algún momento, sonará un despertador, seguido de otro por apenas unos segundos de diferencia. Felicidades, no has dormido. Que tengas un buen día. Y mucha suerte en el examen.


20120108

Rabia (by cCRCc)

Estoy enfermo de rabia.

Ese es el sentimiento que me atormenta.

Es algo que no puedo eludir, mi corazón me ruega verla, abrazarla, besarla, pero mi mente, maldita bastarda racional, me lo niega, me obliga a quedarme quieto mientras siento como la rabia producida por la impotencia me invade, pero, ¿Cómo voy a callar la rabia si sé que no puedo odiarla?

Y ahí estoy yo, abrazado a ella, odiándome a mi mismo por no querer hacerla daño, porque me odiaría aún más si ella se sintiese mal por mi culpa.

No puedo dejar de verla, porque, aunque sea algo que me he autoimpuesto, no debo dejar que se sienta sola, aunque ese hecho signifique coger mi propio corazón y mutilarlo de tal manera que deje de hablar.

Ella me sonríe, yo la sonrío, ¿Qué otra cosa puedo hacer si no?

No quiero, no, no debo expresarle mis sentimientos, porque no podríamos aguantarlo ninguno de los dos, es por eso que prefiero decir lo que no creo, lo que no quiero decir para que no sufra. Mi corazón lo llama hipocresía, mi cabeza lo llama responsabilidad.

Cuanto más tiempo estoy con ella menos me importa el futuro o el pasado, ya que cuando la abrazo, mi mundo se detiene y es como un placebo para mi corazón, el cual deja de llorar, y es cuando mi mente me golpea y me despierta de mi éxtasis.

Ella quiere la protección de un hermano mayor, y yo, ingenuo infeliz, se la proporciono, no puedo odiarla por quererme, ya que yo soy su hermano, y ella solo quiere que siga siéndolo.

Ella me persigue en mi consciencia, su imagen idealizada que mi mente, o tal vez mi corazón ha creado para atormentarme.

Mientras, debo acallar a mi corazón de nuevo y fingir que estoy bien si me preguntan, pero, si ella lo hace eludo dar una respuesta, pues no puedo mentirla, pero por supuesto no puedo (o quizás no quiero) ser sincero con ella.

Cualquier oportunidad que tuviese se ha esfumado, ahora la resignación es mi nueva mejor amiga.

Baladas tristes vienen a mi corazón, ahora teñido de azul, mientras mi cabeza me dice que he hecho lo correcto, soy un pelele, un muñeco sin vida, que no hace más que dar torpes pasos hacia uno y otro lado.

Y ahora es cuando la rabia desde mi estomago me invade a pasos agigantados ya que mi mente me prohíbe acallarla y mi corazón esta demasiado maltrecho como para enfrentarse a ella.

¿Es la rabia mi enfermedad o lo es el amor?


                 
                          "Y ahí estoy yo, abrazado a ella, odiándome a mí mismo por no querer hacerla daño"

20120105

Un año más

Llaman a la puerta.
-Un segundo...-Me digo a mí mismo mientras atravieso el pasillo dando saltos a la pata coja por intentar ponerme unos pantalones.
Llaman de nuevo.
-Voy...-Digo mientras me pongo la primera camiseta que había tirada por mi cuarto.- ¿Quién es?
-Soy el nuevo año, 2012.-Contesta desde el otro lado de la puerta.-Quería hablar contigo, ya sabes contarte lo que va a cambiar y ...
-No me interesa, gracias.- Le interrumpo y me doy la vuelta para volver a mi cueva.
-¡Espera un momento chico! ¿No te interesa saber qué te deparará este año?- Su voz suena con un timbre de maldad. No obstante, la oferta se me presenta tentadora. Pero no.
-Te he dicho que...
-Este año te llega bien cargadito de mierda, chico. Te lloverán golpes por todos los lados ¡No pienso dejarte respira!.- Se ríe muy sonoramente.- No voy a parar hasta hundirte en la miseria, tanto, que las patatas fritas te sabrán a mierda.- Nuevamente, su risa vibra tras la puerta.
-¡Tsk!...- Aprieto los puños con fuerza y siento como la ira recorre mis venas.- Eso será si yo quiero...
-¿Qué ocurre chico? ¿Tienes miedo?- Otra vez esa, risa. Me desquicia.-¿Qué harás? Dime ¿Qué piensas hacer cuando te aplaste?- Para entonces la puerta ya está cayendo. Yo me giro nada más oír el estruendo. Viene hacia mí, pero me espero ese primer golpe. Lo esquivo con facilidad echando el cuerpo hacia atrás, aunque me pasa rozando. En ese momento aprovecho que su centro de gravedad está muy desplazado y no tiene fuerza o punto de apoyo. Le sujeto con las manos, le golpeo con la rodilla derecha y le lanzo por encima de mi hombro contra el dintel de una de las puertas detrás mía.
-Vaya, parece que este año tampoco va a ser muy emocionante.- Bromeo y sonrío de medio lado mientras me froto la cabeza.
-¡Maldito cabrón! ¡Te aplastaré!- Se abalanza contra mí lanzando varios golpes por distintos lados. Pero no me supone ninguna dificultad saltar hacia atrás evitándolos al tiempo que le dedico media sonrisa.
Defiendo uno de sus golpes y lo sujeto con la misma mano. Clavo mi mirada en él y de nuevo le ofrezco una media sonrisa. Le dejo unas milésimas para saborear el miedo, y le ataco con una patada usando mi pierna a modo de guadaña. La ida lo deja casi besando el suelo. La vuelta le hizo llegar a palabras mayores.
Refunfuño con cara de "que puto coñazo, tiene pinta de pesar demasiado". Lo agarro como puedo y lo levanto haciendo un esfuerzo inhumano. Creía que moría aplastado. Tambaleándome torpemente por el peso del año, lo llevo fuera, al rellano.
-¡Tsk!...Parece que este año tampoco tendrá uvas.- Me río a carcajadas mientras dejo la puerta mal colocada en su sitio. Y vuelvo a mi pequeña cueva explicándome mentalmente lo gracioso y absurdo del comentario.

                                                                                             
                                                                                                << Con o sin propósitos, este año tampoco podrá conmigo>>
Powered By Blogger

Seguidores